Delicias de Michoacán.
En un pueblecito llamado Santa Inés municipio de Tocumbo en el estado de Michoacán hace más de 60 años, María de Jesús y Prudencio Barragán iniciaron una aventura que trascendería en el tiempo y cruzaría las fronteras. Tocumbo, es un lugar famoso por ser los pioneros en la fabricación de nieves, paletas y bebidas de fruta fresca. Fue la cuna en donde la familia Barragán inicio un oficio muy artesanal de preparar deliciosos productos y que se ha hecho una costumbre saborear en las familias mexicanas y empieza a conseguir adeptos ahora en Estados Unidos.
Tradición
Continuando con la tradición, a principios de los años ochenta, cuatro de los hijos de María y Prudencio, lidereados por Francisco Javier, siguieron el oficio de sus padres en Guadalajara Jalisco. Llegando a tener 10 tiendas ahí y en otras ciudades cercanas a las que llamaron “Delicias de Michoacán”
Francisco Javier siempre quiso distinguirse de cientos de negocios similares, llamados “La Michoacana”. Primero por el amor y la pasión que entregaba en la elaboración de sus productos, además del cuidado y selección de la fruta e ingredientes con los que fabricaba las paletas, las nieves, las bebidas y otras delicias que empezaron a sobresalir en aquella región de Occidente de México. Llegando a fabricar hasta 6,000 paletas diariamente, por destacar alguno de las decenas de productos que elaboraban en sus tiendas.
Delicias de Michoacán
Ahora la tradición y el nombre de “Delicias de Michoacán” continua con la tercera generación de los Barragán y es María Magdalena, la hija mayor. Nos platica: – Desde muy pequeña conocí el negocio y aunque no me involucraba en la fabricación de los productos conocía “los secretos” y “la formula” del éxito que tenían los negocios de mi papa” concluye.
Magdalena conoció a Ángel, se enamoraron y casaron. Fue entonces que él trabajo y aprendió el oficio, directamente de su suegro. Ángel nos confiesa que admiraba mucho como elaboraba todos los productos, además de los valiosos consejos que le decía, por ejemplo: ¡si va a hacerlo, hágalo bien!. “Utilice siempre los mejores productos” por mencionar algunos.
También puedes leer: Mariscos el bochas
Muchos años después, en el 2014 llega la familia Iñiguez-Barragán, a Tucson e iniciaron su propio negocio. En el principio fue difícil, nos comentan Ángel y Magda, desde buscar una buena ubicación y con instalaciones apropiadas. Posteriormente, remodelar y adecuarlo con diversos materiales y equipos hasta que finalmente iniciaron sus “Delicias de Michoacán” en la Craycroft Rd. casi esquina con la calle 29.
Variedad de Sabores
Querían continuar con la tradición de sus abuelos y padres. Empezaron a elaborar esas delicias como la tradicional limonada, la nieve de fresa las paletas de mango. Querían ofrecer a la comunidad de Tucson ese sabor tan especial y delicioso de disfrutar los productos hechos con frutas frescas e ingredientes naturales.
Pues la tarea fue ardua. Darse a conocer, escoger los mejores proveedores de frutas frescas y otros ingredientes importantes. Elaborar una variedad de productos como nieves, paletas, aguas frescas, incursionar en el “mundo” de los raspados, que, por el intenso calor de Tucson, el publico busca en el verano. También incorporar otros productos que se antojan en el invierno como el champurrado, los tostitos, los elotes, por mencionar algunos.
La clave es la innovación
¡Pero no es todo! comenta Magda: “tienes que continuar innovando y ofreciendo al público sabores nuevos es por eso que mi esposo Ángel “experimenta” con otros ingredientes. Nos relata como “nació” la nieve con «ferrero roche». Que ha sido un éxito desde el primer día que la ofrecimos, también la nieve con “gansito” ha tenido mucha aceptación”.
Ahora sus hijos han crecido, Ángel Jr. Daniel y Camila les toca continuar, comenta Ángel su papa. Nos gustaría crecer, tener otras sucursales, inclusive convertir nuestro negocio en una franquicia. Desde luego, «cuidando la tradición y asegurando que se tenga la misma calidad de nuestros productos” concluye.
Es por eso, que Delicias de Michoacán estará en el gusto de los Tucsonenses. En el mercado Hispano de adultos que quieren continuar saboreando esas delicias que les recuerdan su niñez. Así como la generación de jóvenes que nunca los habían probado. También el mercado de los Estadounidenses que también disfrutan y conocen estos productos a los que no están acostumbrados.